Por: Carlos F. González
Fuente: Propia
Diariamente nos encontramos a la expectativa de las acciones de otras personas para poder ya sea, cumplir nuestras metas, para cerrar un negocio, emprender una empresa y otras razones en la cual de una manera u otras saldremos beneficiados; no solo nosotros, sino tambien una comunidad en la cual nos encontremos activos directa o indirectamente.
A veces nosotros mismos nos comprometemos a hacer ciertas cosas y por X o Y razón terminamos no pudiendo cumplir con nuestra palabras o porque tenemos la agenda tan cargada que se nos olvida totalmente lo prometido.
Pero MUCHAS VECES...las personas se comprometen a hacer ya sea un favor, trabajo o simplemente poner de su tiempo para consejos; cuando la hora de la verdad llega y se les avisa el mismo día con antelación y no satisface su compromiso; entonces la palabra esa persona queda en tela de juicio.
Otros... Por quedar bien frente a las personas, le dicen a uno: "Sí, Sí, Sí " y a la hora de la verdad, no aparecen ni por los centros espiritistas. Esa es otra forma de ganarse la anti-patía de las personas que le rodean.
Uno de los valores que se han perdido, es lo que se le llama "Palabra de Honor". Ese concepto que fueron inculcados a nosotros por nuestros padres y abuelos ha tomado un giro para lo peor.
Las mentiras son tan comunes en nuestra sociedad a tal grado que ya no se puede tomar a nadie en serio. Hay que tener malicia al tratar con las personas por desgracia. Los engaños son los culpables de encontrarnos como estamos. Otros le pueden decir que saben hacer ciertos trabajos y cuando llega el momento de demostrarlo quedan como mentirosos de baja suela.
Imperativamente debemos ser personas de palabra y excelencia. Yo mismo he fallado pero pido disculpas, a la larga siempre cumplo, tarde pero seguro. Pero cuando son proyectos de ímfima importancia, no se comprometa a hacer algo si sabe que no lo puede hacer.
Ese tipo de actitud contra-productiva, es lo que deja mucho de que pensar. Pero al encontrarnos a personas así, lo mejor que se hace es que como dijo el Cristo: "Sacúdanse los pies y sigan andando".
Desde Borínquen y para Controvercias en Puerto Rico
Carlos F. González
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